Southern Perú Copper Corporation avanza en la consolidación de uno de sus proyectos más emblemáticos: Tía María, en la región Arequipa. El presidente ejecutivo de la compañía, Óscar González Rocha, confirmó que el cronograma se mantiene dentro de lo previsto y que la primera producción se entregará en dos años.
“Estamos avanzando con los trabajos preliminares, se ha cumplido con todos los requisitos que nos han indicado las autoridades. El cronograma de ejecución avanza dentro de lo previsto, pero sí confirmamos que en el 2027 estaremos entregando al mercado nacional o internacional el primer cátodo de Tía María”, aseguró el ejecutivo.
Además, González destacó que el relacionamiento social en el valle de Tambo constituye un eje prioritario: “Actualmente, se ha reforzado el trabajo que venimos desarrollando en favor de la población del valle de Tambo. Estamos apoyando a la agricultura y a la ganadería local, promoviendo la incorporación de nuevas tecnologías que permitan incrementar su producción y, por consiguiente, disponer de mayores ingresos para sus familias”.
En la actualidad, más de 800 trabajadores de Tía María provienen de la zona, y ellos mismos o sus familiares cumplen labores vinculadas al desarrollo del proyecto como en la agricultura, porque “están convencidos que ambas actividades pueden convivir y complementarse mutuamente”, señaló el representante de Southern. En ese marco, la compañía ha definido cinco ejes sociales en el valle: Tecnificación del Agro, Internet para Todos, Trabajo Digno, Educación y Salud de calidad.
Inversión y retos
En términos de su aporte económico, Tía María representa un hito: contempla una inversión de US$1,802 millones y durante su vida útil, estimada en 20 años, aportará US$ 3,800 millones en impuestos y regalías. “Exportaremos 120 mil toneladas métricas de cátodos Grade ‘A’ de cobre al año. Generaremos 3,500 puestos de trabajo durante la fase de construcción y ellos, en su inmensa mayoría, procederán de la provincia de Islay. Además, nuestras estimaciones indican que se generarán 5,900 puestos de trabajo indirectos, los que dinamizarán todavía más la economía local y regional”, aseveró González.
Respecto a los retos enfrentados, el ejecutivo fue enfático: “Siempre habrá desafíos, pero hay que persistir si tenemos la seguridad de que estamos trabajando por un proyecto que será beneficioso para todo el país, en particular para la provincia de Islay en la región Arequipa”.
En opinión de González, el volumen de inversión proyectado es también una señal hacia el exterior. “El monto de US$1,802 millones es tan significativo, que emite un mensaje positivo a la comunidad internacional de inversionistas, transmite: ‘El Perú es confiable, vengan todos a colaborar con su desarrollo’”.
Expansión y proyección
El plan de expansión de Southern Perú no se limita a Tía María. La compañía mantiene en cartera proyectos clave en diversas regiones.
“Nuestra producción de cobre fino contenido en cátodos de cobre y concentrados es de alrededor de 450 mil toneladas métricas anuales. Con el desarrollo de Tía María en Arequipa; Los Chancas, en Apurímac; Michiquillay, en Cajamarca; y, posteriormente, una ampliación de la mina Cuajone (en Moquegua), confiamos que alcanzaremos la cifra del millón de toneladas de cobre al año y se hará realidad la construcción de una segunda fundición y la ampliación de la actual refinería”, detalló González.
El presidente ejecutivo de Southern remarcó que la visión de la compañía es de largo plazo: “En Southern Perú hay trabajo sostenible para muchas décadas. Nuestro objetivo es poner en valor el potencial minero del Perú y convertirlo en el primer productor de cobre del mundo. Es un objetivo viable, estoy convencido de ello y el equipo que lidero está trabajando para alcanzarlo”.