El sector eléctrico peruano experimenta una transformación significativa con la adopción de redes eléctricas inteligentes o smart grids. Estas innovaciones modernizan la infraestructura eléctrica e integran tecnologías avanzadas de comunicación y monitoreo en tiempo real para optimizar la distribución de energía y mejorar la experiencia del usuario.
Una iniciativa clave es la implementación de medidores inteligentes o Infraestructura de Medición Avanzada (AMI). Estos dispositivos permiten a los consumidores monitorear su consumo eléctrico en intervalos cortos y facilitan una gestión más eficiente de la energía. Además, mejoran la estabilidad de la red al proporcionar a las empresas distribuidoras datos precisos para equilibrar la oferta y demanda en tiempo real.
Pluz Energía (antes Enel Distribución Perú) ha implementado proyectos piloto de medición avanzada que permiten la lectura remota y gestión eficiente del suministro eléctrico. La empresa ha instalado más de 16 mil medidores inteligentes para grandes clientes industriales y comerciales en su zona de concesión, capaces de generar alertas sobre intrusión o manipulación. En sus subestaciones de distribución, cuenta con 6,500 medidores telegestionados para controlar pérdidas de energía y realizar seguimientos de consumo diario. Para combatir el hurto de energía, ha implementado más de 12 mil unidades de cajas de medidores antihurto al cierre de 2023.
Por su parte, la otra empresa de distribución eléctrica de Lima, Luz del Sur, cuenta con un proyecto piloto con 18,500 medidores inteligentes. Según Lorena Trelles Guzmán, jefa de Relaciones Públicas de la compañía, estos dispositivos permiten a los usuarios monitorear su consumo cada 15 minutos y por el lado de la empresa, recabar información del comportamiento de la red eléctrica, asimismo les permite efectuar operaciones remotas sobre los medidores. “Se ha demostrado en el mundo que esta es una gran herramienta para gestionar la red eléctrica y hacer más eficiente la distribución de energía”, afirma Trelles.
Hacia un sistema más resiliente y eficiente
La implementación de redes inteligentes fortalece la flexibilidad y resiliencia del sistema eléctrico. Estas redes detectan interrupciones instantáneamente y responden con rapidez —en algunos casos de forma automática— para restablecer el servicio.
“Las redes inteligentes facilitan la integración de energías renovables, como la solar domiciliaria, equilibrando la oferta y demanda en tiempo real. Esto también permite optimizar el consumo energético, reducir pérdidas y ofrecer a los clientes un servicio más eficiente y confiable. Hacia allá vamos”, señala Trelles.
Por su parte, ISA REP, una de las empresas líderes de la transmisión de energía eléctrica en el Perú, coincide en este enfoque. “Buscamos que el sistema eléctrico sea más flexible, seguro y confiable, integrando energías renovables y asegurando que la electricidad llegue a los usuarios finales de forma segura”, afirma Jorge Lafitte Vega, gerente de Operación y Mantenimiento de la empresa.
Así, Pluz Energía, Luz del Sur e ISA REP coinciden en que las redes inteligentes son esenciales para garantizar un suministro confiable. Estas tecnologías no solo optimizan el consumo energético y reducen pérdidas, sino que también integran sistemas avanzados de monitoreo, aumentando la seguridad y la eficiencia en las operaciones.
Innovación en la transmisión eléctrica
En el ámbito de la transmisión, ISA REP se ha posicionado como un actor clave en la transformación hacia las redes inteligentes. Lafitte señala que los principales desafíos están en la digitalización de procesos, la implementación de tecnologías avanzadas y la preparación del equipo humano. “Nuestros planes de trabajo deben adaptarse a los retos del cambio climático y otros eventos atmosféricos o geográficos que puedan afectar nuestras instalaciones”, subraya.
ISA REP ha desarrollado proyectos innovadores, como la repotenciación de líneas de transmisión con sistemas FACTS (Flexible Alternating Current Transmission Systems). Estas tecnologías aumentan la capacidad de transporte de energía eléctrica y deberían mitigar fenómenos como la resonancia subsíncrona —una interacción dinámica entre los generadores y el sistema eléctrico que puede causar oscilaciones dañinas en las turbinas—, mejorando la estabilidad y eficiencia del sistema eléctrico.
En telecomunicaciones, la empresa ha establecido un centro gestor unificado que se proyecta a contar con tecnología MPLS-TP, que maneje grandes volúmenes de información de forma eficiente y segura. Además, ha introducido asistencia remota en sus subestaciones, a través de cámaras operativas que permiten aumentar la seguridad y agilidad en la respuesta a contingencias.
“Estamos siempre modernizando y reemplazando los activos del sistema eléctrico con la finalidad de asegurar la confiabilidad de nuestro servicio y, además, que las señales y los datos necesarios para transmitir información desde las subestaciones a nuestro centro de control y al Centro de Operación Nacional (COES), estén articulados con una infraestructura de última tecnología”, detalla Laffite.
La ciberseguridad es otro pilar fundamental en la estrategia de ISA REP. Se han implementado anillos de seguridad en subestaciones con arquitecturas estandarizadas que controlan rigurosamente el tráfico de red, garantizando la resiliencia ante posibles ciberataques. “Un sistema inteligente debe ser capaz de identificar, bloquear y responder a amenazas de manera inmediata”, enfatiza Lafitte.
Digitalización: clave para el sistema eléctrico
Pluz Energía lidera esfuerzos clave en esta transformación con un enfoque integral: digitalización de procesos, innovación en infraestructura y fortalecimiento de su parque de medición. En el 2023, llevó a cabo casi 30 mil verificaciones del sistema de medición eléctrica, con solo 2% de medidores fuera del margen de precisión permitido. Además, verificó más de 123 mil medidores como parte del mantenimiento preventivo y reemplazó más de 2,250 unidades, mejorando la calidad del servicio.
Entre sus iniciativas destacadas está la renovación de transformadores en la Subestación Chavarría, beneficiando a más de 240,000 usuarios de Lima Norte. En el 2023, instaló 20,449 medidores inteligentes, sumándose a los 18,030 del 2022. Estos dispositivos permiten medición bidireccional —posibilitando que los clientes inyecten energía a la red— y una operación dinámica mediante la transmisión continua y encriptada de información. Los proyectos integran un monitoreo digital en tiempo real de gases y temperaturas, fortaleciendo la confiabilidad del servicio.
Un futuro competitivo y sostenible
En el contexto actual de transformación energética global, el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) ha trabajado en una “Hoja de Ruta de Redes Eléctricas Inteligentes (Smart Grids) en la Distribución 2023-2030”, que pretende establecer un marco para la transformación del sistema eléctrico peruano hacia una infraestructura moderna y sostenible. La hoja de ruta incluye la creación de capacidades técnicas y regulatorias, así como la incorporación progresiva de tecnologías como el almacenamiento de energía y microrredes, enfocado en la interoperabilidad y el análisis de datos. Esta hoja de ruta, además de aspirar a convertir al usuario en un actor activo dentro del ecosistema energético, busca optimizar la infraestructura eléctrica.
En ese sentido, uno de los proyectos de expansión más destacados de ISA REP es la construcción de líneas de transmisión de 500 kV, esenciales para transportar grandes volúmenes de energía entre las regiones y respaldar el crecimiento de energías renovables.
“Miramos que el sistema se robustezca con más supercorredores en sistemas de 500 mil voltios, y un sistema de transmisión nacional completamente interconectado, eliminando zonas aisladas, como por ejemplo Iquitos, conectándolas al sistema principal de transmisión. También visualizamos soluciones de almacenamiento de energía abiertas, donde todos los agentes interesados puedan competir libremente con propuestas innovadoras y viables”, explica Lafitte.
En tanto, para Luz del Sur, el gran desafío es garantizar la confiabilidad y resiliencia de las redes eléctricas en Lima, Huarochirí y Cañete. La empresa enfatiza que robustecer la infraestructura con tecnología avanzada es clave para responder ágilmente ante interrupciones e integrar energías renovables. “Estamos preparados para afrontar los desafíos del avance tecnológico, asegurando un suministro eléctrico moderno y resiliente para nuestros más de 1.3 millones de clientes”, afirma Trelles.
La adopción de estas tecnologías marca un paso decisivo hacia un sistema eléctrico más eficiente y sostenible en el Perú, alineado con las tendencias globales de modernización y digitalización del sector energético.