“En un mundo cada vez más digital, la presencia y comunicación en redes sociales se han convertido en pilares fundamentales para el liderazgo empresarial”, escribió en su cuenta de LinkedIn Verónica Arbulú, gerenta legal y de Asuntos Corporativos de la empresa eléctrica Statkraft Perú, tras ser reconocida en el Top 1 del Ranking de Directivos Digitales Comunicación Energía por la agencia Verne Future Mindset.
Su presencia en plataformas digitales como LinkedIn y X (antes Twitter), señala la publicación, le han permitido construir una marca digital sólida. “Su enfoque en la autenticidad y la humanización de las empresas en las redes sociales le ha permitido establecer conexiones sólidas y construir relaciones valiosas en línea”, dice la agencia.
Y es que para Arbulú —abogada con más de 18 años de experiencia en derecho corporativo— las redes sociales son una oportunidad para aprender, conectar y compartir información valiosa. Pero, sobre todo, es una responsabilidad que asume con el objetivo de impulsar la presencia y liderazgo de más mujeres en el sector eléctrico.
“En un sector que por muchos años ha sido muy masculino, no han sido visibles muchas mujeres del sector que pueden servir como referentes. Y hay muchas creencias limitantes de que en sectores como el energético o el minero, las mujeres no pueden avanzar en su carrera. Y nos toca ir derrumbándolos para que más mujeres puedan ayudar a otras a seguir subiendo”, explica Arbulú.
Desde que ingresó a Statkraft, en 2013, la ejecutiva ha liderado la implementación de políticas y programas para fomentar la diversidad y la inclusión en el sector; desde programas de becas para atraer y retener talento femenino, charlas sobre corresponsabilidad familiar para distribuir las tareas del hogar igualitariamente, hasta el posnatal extendido y el reclutamiento ciego.
Sin embargo, ella reconoce que el principal desafío ha sido el cambio cultural y la necesidad de romper sesgos arraigados en la industria. “Por más que tú quieras implementar muchísimas políticas y programas, si no tienes el cambio cultural primero, esos programas y políticas no se sostienen en el tiempo. Entonces, hemos trabajado muchísimo con las personas para que puedan romper esos sesgos. Es un trabajo de largo aliento y es un trabajo del día a día”, refiere Arbulú.
“Para los tiempos que vivimos, rodearse de equipos diversos en género, en cultura, en pensamiento, y que te reten a pensar distinto y a una nueva manera de generar negocios, no solo contribuye a la rentabilidad de la empresa, sino también al cumplimiento de las políticas de responsabilidad con el medio ambiente, con las comunidades y con el entorno”, concluye.