Desde su inicio en 1977, San Rafael ha sido un pilar para la región de Puno, demostrando que es posible realizar minería con propósito. Su producción representa el 12% del estaño global y destaca por ser una de las primeras en lograr una trazabilidad del 100%. A lo largo de casi cinco décadas, la mina ha destacado por su modelo operativo basado en economía circular y eficiencia energética, así como por la implementación de tecnologías innovadoras como el Ore sorting y la Planta B2, esta última reconocida con el Premio Creatividad Empresarial y Perú por los ODS.
Además, San Rafael ha mantenido estándares de seguridad de clase mundial y una relación respetuosa con el entorno ambiental, cultural y social. Este aniversario no solo celebra los logros del pasado, sino que también refuerza la determinación de seguir construyendo un futuro sostenible y lleno de oportunidades para las comunidades y el sector minero.
La Unidad Minera San Rafael agradece a todos los equipos, socios estratégicos y comunidades que han sido parte de esta trayectoria, reafirmando su compromiso con la excelencia y la innovación responsable.