En un despliegue estratégico contra las organizaciones criminales que promueven la minera ilegal en la provincia de Pataz, región La Libertad, el sector Defensa, a través del Comando Unificado Pataz (CUPAZ), ejecutó la operación ‘Martillo 3’ en la bocamina Villalba, ubicado en la quebrada Porfia, donde permanecían secuestradas 15 personas.
Personal de élite del CUPAZ, formado por miembros de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional, intervinieron en dicha bocamina el 13 de diciembre, a las 23:00 horas, tras tomar conocimiento que elementos de seguridad de la minera en mención había sido violentada por presuntos extorsionadores, quienes efectuaron disparos y profirieron amenazas.
Inmediatamente, miembros de fuerzas especiales de la Fuerza Especial Conjunta (FFAA) y del Grupo Especial Contra el Crimen Organizado (GRECCO PNP) desplegaron una intervención estratégica en la zona y se enfrentaron con fuego cruzado, repeliendo el ataque de forma eficaz, en estricto respeto al marco legal y a los derechos humanos, logrando liberar a las personas que fueron tomadas como rehenes.
En el aseguramiento del área se identificaron y desactivaron artefactos explosivos listos para detonar, evitando un riesgo inminente para los rehenes y el personal interviniente. Asimismo, se recolectaron cartuchos de munición percutados, conforme a los procedimientos establecidos.
Como resultado de la presión operativa sostenida, tras aproximadamente una hora de intervención, los captores iniciaron la liberación progresiva de los secuestrados, siendo el último liberado alrededor de las 09:00 horas del día siguiente.
En su intento por evadir la acción de las fuerzas del orden, la organización criminal detonó cargas explosivas en el acceso principal y la galería interna de la bocamina, provocando el colapso de las vías de ingreso, una acción deliberada destinada a obstaculizar el avance del personal militar y policial.
Las 15 personas liberadas fueron puestas a buen recaudo, sin registrarse bajas ni lesiones, garantizándose plenamente su integridad física. Este resultado reafirma la eficacia del trabajo conjunto y la capacidad operativa del Estado para proteger la vida y restablecer el orden frente a amenazas criminales de alta peligrosidad.
En este marco, el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, General de Ejército David Ojeda Parra, destacó que el Estado actuó con decisión y unidad.
“La operación Martillo 3 evidencia que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional operan de manera integrada, profesional y permanente, protegiendo la vida de los ciudadanos y restableciendo el principio de autoridad. Frente al crimen organizado, la respuesta del Estado a través de sus Fuerzas Armadas es firme, sostenida y dentro del marco constitucional”, resaltó.
El sector Defensa, a través del accionar decidido y coordinado de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, reafirma su compromiso inquebrantable en la lucha frontal contra el crimen organizado y la minería ilegal, priorizando en todo momento la protección de la vida humana, el respeto al Estado de derecho y la seguridad de las poblaciones afectadas por estas amenazas.
Las Fuerzas Armadas, en cumplimiento de su mandato constitucional, seguirán actuando con firmeza, disciplina y respeto a los derechos humanos, garantizando el principio de autoridad y contribuyendo a la seguridad integral de todos los peruanos.
Fuente: Ministerio de Defensa.