En los últimos años, Antamina se ha planteado ser una empresa que ejerza un papel de catalizador social con el propósito de mejorar la calidad de vida de las personas de su área de influencia y su acceso real a los Derechos Humanos.
Así, crearon el Programa de Derechos Humanos, el cual está diseñado como un sistema de gestión que les permite verificar y actuar dentro de ese propósito. Ese diseño les permite identificar oportunidades de mejora y ser auditados a través de nuestras áreas de Excelencia Operacional y de Riesgo.
“Obtuvimos la aprobación de la política de Derechos Humanos en el 2018. Esta ha sido traducida al quechua y tenemos spots radiales que se lanzan en radios locales y también a nivel interno en la empresa. Esto demuestra el compromiso de nuestra alta dirección con el tema de la promoción y respeto de los Derechos Humanos”, señaló Giovanna Angulo, encargada del Programa de Derechos Humanos de Antamina.
Dicho programa contempla el cumplimiento de Disposiciones Legales y Normativa Internacional, una cultura organizacional y práctica cotidiana que engloba trabajos a nivel interno, con socios estratégicos —contratistas y proveedores— y con la comunidad.
Riesgos y oportunidades
Asimismo, en Antamina cuentan con el Sistema de Gestión de Riesgos (SIGRA), en el que se integran y actualizan los riesgos relacionados a los Derechos Humanos, los cuales son controlados, supervisados y actualizados regularmente.
“Anualmente realizamos talleres de revisión y actualización de los riesgos, así como verificaciones de la pertinencia y eficacia de los controles. Además, contamos con auditorías internas que nos permiten hacer el seguimiento e implementación de nuestros riesgos y controles”, recalcó Angulo.
Dentro de ese contexto, a través del papel de catalizador social, la compañía busca generar intervenciones que tengan un impacto positivo en la población de su área de influencia en temas de educación, salud, igualdad de género y corrupción.
Capacitaciones
Además, cuentan con un programa de capacitación en Derechos Humanos dirigido a trabajadores y socios estratégicos que empezó en el 2020.
“El año pasado hemos cumplido con capacitar al 95% de nuestros trabajadores en temas de Derechos Humanos y ahora nuestro compromiso es tener una capacitación anual”, mencionó Angulo.
Asimismo, Antamina también posee un mecanismo de quejas y reclamos, un proceso de debida diligencia llevado a cabo cada tres años —este año se realizará uno— y un informe anual sobre su desempeño en Derechos Humanos elaborado por un tercero independiente.