Con una inversión de US$ 1,473 millones en su construcción y operación, Zafranal es una de las grandes promesas mineras de Arequipa. El proyecto —ubicado entre los distritos de Huancarqui y Lluta, en las provincias de Castilla y Caylloma— recibió en mayo la aprobación de su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y, ahora, la compañía busca suscribir el contrato por derechos superficiales para los componentes de acceso principal y campo de pozos.
Así lo señaló el gerente general de Compañía Minera Zafranal, Mario Baeza, durante la ponencia “Zafranal: Una oportunidad para el desarrollo sostenible de Arequipa”, llevada a cabo en el VIII Encuentro de Mineros y Proveedores (MINPRO) 2023. Baeza agregó que continuarán con los programas de comunicación y relacionamiento con los diferentes grupos de interés de las áreas de influencia.
Camino a su construcción
La compañía aún se encuentra en proceso de selección del contratista EPCM (Ingeniería, Adquisiciones, Construcción y Gestión), bajo la modalidad de ejecución de ingeniería, compra y administración de construcción. “[Con la selección lista], la ingeniería de detalle esperamos iniciarla en agosto o septiembre de este año”, dijo Baeza.
Así, en Zafranal esperan obtener el permiso de construcción y presentar el proyecto para decisión de inversión a sus accionistas (Teck Resources Limited y Mitsubishi Materials Corporation) en el cuarto trimestre de 2024. Para iniciar las obras tempranas, la empresa señaló el primer trimestre de 2025 y la entrada en producción comercial, en el 2028, afirmó Baeza.
El plan de minado del proyecto Zafranal contempla la extracción de aproximadamente 370 millones de toneladas (Mt) de mineral de sulfuros y 502 Mt de desmonte de roca. La construcción del proyecto Zafranal tomaría tres años para que, seguidamente, produzca concentrados de cobre, con bajo contenido de oro, durante 19 años de explotación en dos tajos.
Ubicación
Una de las razones para que Zafranal sea un proyecto viable y sostenible se debe a su ubicación, indicó Baeza. Este se encuentra en una zona semidesértica. No hay zonas agrícolas aledañas y el centro poblado más cercano está a 20 kilómetros de distancia.
Además, Zafranal no se encuentra en territorios de comunidades campesinas nativas o de pueblos indígenas. Tampoco hay áreas naturales protegidas ni áreas de conservación en la zona. Por último, está ubicado en un área media de la cuenca de los ríos Camaná, Majes y Colca. Así, se prevé que utilice menos del 10% del volumen del acuífero debajo de las pampas de Majes.
Impacto positivo
Durante la etapa de construcción de Zafranal, Baeza refirió que el PBI de Arequipa se incrementará entre 1.4% y 4.8%, y durante la etapa de operación, el impacto en el PBI arequipeño estará entre 2.9% y 6.6%. Además, se generarán más de 5,226 puestos de trabajo, entre directos e indirectos.
En sus 19 años de operación, el proyecto generaría un total estimado de US$ 1,519 millones en ingresos fiscales. El canon minero durante la vida del proyecto alcanzará US$ 490 millones, a partir del segundo año de operación. Y el monto estimado de regalías mineras será de US$ 150 millones a lo largo de la vida del proyecto.